Llegó anteayer de EE.UU y no dudó un segundo cuando la invitaron para asistir a la inauguración de la temporada turística 2009 de Las Termas de Río Hondo, que se realizo el sábado 2 de mayo, con la asistencia del gobernador Gerardo Zamora.
“Me invitaron para la inauguración de Las Termas y dije: ¡allá vamos!”, esas fueron sus primeras palabras cuando fue abordada, en el aeroparque local, por periodistas santiagueños donde, entre otras cosas, confirmó su regreso a
“Me da mucho placer, me encanta, me siento cómoda, feliz, me gusta la gente, me gusta el clima, me reciben muy bien, me reciben como en mi casa, que lindo. Después de Santa Fe, Santiago del Estero es la provincia que más quiero”, aseguró la diva argentina.
¿Cómo toma esa popularidad consolidada que usted tiene entre los argentinos?
“Lo tomo con mucho agradecimiento y con mucha emoción. Algo habré hecho para que me quieran tanto. En algo habré colaborado y lo sigo haciendo. Podría estar en mi casa, descansando, disfrutando de lo que la vida me ha dado y sin embargo sigo en la brecha, en mi trabajo, que me encanta”.
Desde la producción de su programa están realizando gestiones para traer, para su primer programa del ciclo
“Ella no va a ningún lado. De Casa de Gobierno no sale. No va a ningún programa, no al mío. ¡Me encantaría!”
A partir de la incorporación de de Nacha Guevara en sus filas, ¿se “menemizó” el kirchnerismo?
“No, no creo. Siempre recurren a alguien del espectáculo. A ella le gusta mucho la política. Es una mujer que ha hecho política en algún momento desde el partido al cual pertenecía. Es una buena elección. Es una mujer muy inteligente y capaz. Creo que va a trabajar mucho y muy bien. Creo que el trabajo del legislador es más complicado de lo que parece. Por algo habrá aceptado. Ella se tendrá confianza”.
¿Cómo sobrelleva la situación familiar a partir de la exposición mediática de su nieta Juanita Viales?
“Ah no, no, de eso no hablo. Juanita es mi nieta, es un ser adorable, la amo y nadie la conoce como es realmente: un ser adorable, encantador, tierno y digno de ser querido y respetado”.
¿Se siente usted la voz de los que no tienen voces a través de “Almorzando con Mirtha Legrand?
“Un programa diario, de casi dos horas, da mucha popularidad. Es un poder, te da poder y, además, uno tiene poder y se ocupa de los más necesitados, sí, me siento, en algún modo, la voz de la gente que lo necesita realmente. Cuando tengo que decir algo en contra del gobierno, lo digo. No tengo miedo”.
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