Por Emilio Marcelo Jozami
mjozami@elliberal.com.ar
emiliomarcelojozami@gmail.com
“Debajo de las polleras”, obra que estrenó anteanoche el grupo de teatro “Yo, Casta” en Adatise, es impiadosa con los hombres. Sus protagonistas (una creativa publicitaria, una psicóloga y una secretaria) remarcan desde el inicio hasta el final los comportamientos sexuales de ellos, y lo hacen de una manera socarrona e irónica.
Mariela Díaz, Claudia Chávez y Maritza Díaz, tres actrices santiagueñas, cumplen con creces con sus personajes. Y con ellas se luce el actor Carlos Arismendi quien, en un despliegue de talento y creatividad, elabora a seis personajes distintos (Nacho, Sebastián, Silvio, Fede, Matías y Pocho). Él es el blanco del escarnio de estas tres chicas superpoderosas que no trepidan en degradarlo.
Con mínimos pero certeros elementos escenográficos, una iluminación pertinente y con una música adecuada para cada clima que requiere las historias que se cuentan, “Debajo de las polleras” no es, aunque parezca, una obra feminista. Es una pieza que, con la clave del humor, se desarrollan situaciones cotidianas y reales relacionadas con el sexo.
Lo que muchas veces no nos animamos a expresar sobre fantasías sexuales desde la formalidad, Mariela (fantástica como siempre), Claudia (contenido y maravilloso personaje) y Maritza (bellísima y desbordada composición) lo hacen a través de situaciones disparatadas y sin caer en ramplonerías que pudieran dañar el mensaje.
“Debajo de las polleras” tiene una puesta dinámica y una historia identificable para cualquier mortal. Es una comedia donde este elenco, dirigido efectivamente por Myrian Berra, y a través de la estética teatral del grotesco, refleja momentos por el que atraviesan mujeres entre los 20 y 45 en las sociedades modernas.
Habla de las idas y venidas entre géneros. Escrita por el uruguayo Franklin Rodríguez, propone momentos de reflexión, con toques de comedia a lo Woody Allen (“Todo lo que usted quiso saber sobre el sexo y nunca se atrevió a preguntar) y un coqueteo con Pedro Almodóvar (“Mujeres al borde de un ataque de nervios”).
Sáquese de encima cualquier prejuicio y, el próximo viernes 20, sábado 21 y domingo 22 de marzo, siempre a las 22, asista a ver a esta comedia alocada e irreverente por donde se la busque. “Yo, Casta”, no lo defraudará. Diversión garantizada.
“Debajo de las polleras”, obra que estrenó anteanoche el grupo de teatro “Yo, Casta” en Adatise, es impiadosa con los hombres. Sus protagonistas (una creativa publicitaria, una psicóloga y una secretaria) remarcan desde el inicio hasta el final los comportamientos sexuales de ellos, y lo hacen de una manera socarrona e irónica.
Mariela Díaz, Claudia Chávez y Maritza Díaz, tres actrices santiagueñas, cumplen con creces con sus personajes. Y con ellas se luce el actor Carlos Arismendi quien, en un despliegue de talento y creatividad, elabora a seis personajes distintos (Nacho, Sebastián, Silvio, Fede, Matías y Pocho). Él es el blanco del escarnio de estas tres chicas superpoderosas que no trepidan en degradarlo.
Con mínimos pero certeros elementos escenográficos, una iluminación pertinente y con una música adecuada para cada clima que requiere las historias que se cuentan, “Debajo de las polleras” no es, aunque parezca, una obra feminista. Es una pieza que, con la clave del humor, se desarrollan situaciones cotidianas y reales relacionadas con el sexo.
Lo que muchas veces no nos animamos a expresar sobre fantasías sexuales desde la formalidad, Mariela (fantástica como siempre), Claudia (contenido y maravilloso personaje) y Maritza (bellísima y desbordada composición) lo hacen a través de situaciones disparatadas y sin caer en ramplonerías que pudieran dañar el mensaje.
“Debajo de las polleras” tiene una puesta dinámica y una historia identificable para cualquier mortal. Es una comedia donde este elenco, dirigido efectivamente por Myrian Berra, y a través de la estética teatral del grotesco, refleja momentos por el que atraviesan mujeres entre los 20 y 45 en las sociedades modernas.
Habla de las idas y venidas entre géneros. Escrita por el uruguayo Franklin Rodríguez, propone momentos de reflexión, con toques de comedia a lo Woody Allen (“Todo lo que usted quiso saber sobre el sexo y nunca se atrevió a preguntar) y un coqueteo con Pedro Almodóvar (“Mujeres al borde de un ataque de nervios”).
Sáquese de encima cualquier prejuicio y, el próximo viernes 20, sábado 21 y domingo 22 de marzo, siempre a las 22, asista a ver a esta comedia alocada e irreverente por donde se la busque. “Yo, Casta”, no lo defraudará. Diversión garantizada.
gracias por el apoyo y la presencia.
ResponderEliminarsiempre cerca de los artistas.
Y MIL GRACIAS POR TU APRECIACION DE LA OBRA. LE PUSIMOS MUCHO AMOR AL PROYECTO.
besitos mil !!!!!!!!!!!!!!!